Lim replantearse seriamente la adquisición del club, junto a la elevada cantidad de descalificaciones constantes que recibía por parte de un sector de la prensa valenciana, tanto hacia él como hacia su oferta. Sin embargo, había perdido gran parte del apoyo de la masa social. En la temporada 1921 / 1922, Julián Ruete continuó en la presidencia debido a su prestigio personal y a su abnegado trabajo por el club.