Buffon sufrió una lesión menor y no pudo estar presente en el primer partido de la liga en la temporada 2012-13 ante el Parma el 25 de agosto. Durante la temporada 2011-12 obtuvo su tercer título de liga con una fecha de anticipación y de forma invicta, producto de veintitrés victorias y quince empates. Además superó su propio récord de goles encajados, solo permitió dieciséis goles en treinta y cinco apariciones y permaneció durante 568 minutos sin recibir anotaciones.